Fruto del platanero Musa x paradisiaca L. var. Sapientum. Contiene un 21% de hidratos de carbono, inicialmente en forma de almidón, y según va madurando se transforma en sacarosa, glucosa y fructosa. Si se toma verde suele causar flatulencias y dispepsia.
Es muy rico en vitamina B6, y contiene cantidades significativas de vitaminas C, B1, B2, E, ftalatos. En minerales destaca el potasio, magnesio y hierro. Contiene fibra soluble e insoluble en cantidades importantes, ayudando al tránsito intestinal y a descender el nivel de colesterol. También destaca la presencia de serotonina, sedante y vasodilatador arterial.
Indicaciones:
Afecciones cardíacas. Ideal para todos los pacientes del corazón y del sistema circulatorio, debido a su gran contenido en potasio y ausencia de sodio. Previene la hipertensión, las arritmias, la trombosis arterial. Además las vitaminas del grupo B son necesarias para el músculo del corazón, y el magnesio previene la arteriosclerosis y el infarto.
Afecciones intestinales. Alivia diarreas, y es ideal, junto al maíz y al arroz, para los celíacos.
Artritis úrica y gota. Al ser alcalinizante, contribuye a eliminar el exceso de ácido úrico.
Además, es la fruta ideal para regímenes bajos en sodio, y es adecuada para pacientes de diabetes.
Preparación: lo ideal es consumirlo crudo, y al poderse tomar sin cubiertos, es una fruta adecuada para todo momento. Si se come en los países productores, suele ser más sabroso ya que ha madurado en el árbol, mientras que el que se comercializa en Europa debe recolectarse verde para su transporte y madura con menos vitaminas y azúcares. En el caso de plátano macho, rico en almidón, debe cocerse como se haría con las patatas; es la alimentación base en algunas regiones tropicales.
